
CARTELERA
En una conversación con Puerta Escénica, el actor Onofre Contreras compartió su experiencia en el mundo del teatro, su visión sobre la actuación y su participación en “Te amo Fausto tercero”. Originario de Albacete, España, y radicado en la Ciudad de México, Contreras ha construido una sólida carrera en teatro y televisión, enfrentando los desafíos de la industria con pasión y entrega.
El teatro es arte, vida y conexión
Onofre Contreras
Los inicios en el teatro
Desde niño, Onofre Contreras descubrió la magia del teatro en la escuela, donde se permitió explorar la posibilidad de ser algo más allá de sí mismo. “El poder crear a través de mí es una forma de desconectar para conectar con algo o alguien más”, comenta. Sin embargo, su formación profesional llegó más adelante, cuando comenzó a tomar clases y talleres especializados que le permitieron desarrollar técnicas más sofisticadas. Su debut como actor profesional le dio una experiencia transformadora: “Una vez que vives la experiencia de subirte a un escenario y dar una función, es una sensación indescriptible”.


El teatro como desarrollo personal
Para Contreras, el teatro es mucho más que entretenimiento; es una herramienta de crecimiento y autoconocimiento. “El teatro es arte, es vida, es conectar, sentir y también una forma de desarrollo personal. Nos ayuda a liberar y crecer como personas”. Esta filosofía lo ha acompañado a lo largo de su carrera, donde cada personaje y cada función han sido oportunidades para aprender y evolucionar tanto en el escenario como en la vida cotidiana. “Estar presente en todo momento y escuchar a los compañeros es algo que aplicas también en tu día a día”.
Con una carrera diversa, Onofre Contreras ha participado en montajes teatrales como Noches de la Sixtina, La Tierra de Alvargonzález, Así es el amor, Casamiento a la fuerza, El Cid y El Taller del Orfebre, entre otras. Su presencia también ha sido notable en televisión con proyectos como Luis Miguel, la serie, El Rey, Vicente Fernández, El brazo corto de la ley, Rubí, Monarca y Quién mató a Sara?.
El teatro es arte, es vida, es conectar, sentir y también una forma de desarrollo personal. Nos ayuda a liberar y crecer como personas.
Onofre Contreras

El camino del actor no es fácil, y Onofre lo sabe bien. “Abrirse camino en la industria del teatro es complicado. La competencia es cada vez más fuerte, la gente se prepara más y la remuneración suele ser escasa. Por eso, es fundamental amar el teatro y estar dispuesto a sacrificar muchas cosas para seguir formándose y mejorando”. Además, resalta la exigencia del teatro, que demanda mucho tiempo de creación y ensayos.
“Es tiempo que no podemos invertir en otras cosas, pero si amas el teatro, no hay duda de que vale la pena”.
Onofre Contreras
Método y formación
Cada actor tiene su propia forma de interpretar, y Onofre ha encontrado su camino en la presencia y la conexión con el momento. “Para mí, lo más importante es estar en el presente, sentir y escuchar”. En su formación, ha tenido maestros que han marcado su carrera, como Victoria Hernández, quien le enseñó la importancia de estar presente, y René Pereira, quien le introdujo en la técnica del método. “Todos tenemos nuestra manera de construir personajes, pero estas enseñanzas me han dado las bases para crear desde la verdad”.
La adrenalina del teatro es pura emoción
Onofre Contreras

Cuando se le pregunta qué es lo que más disfruta de su profesión, su respuesta es clara: “Lo que más me gusta es que me siento libre. Puedo dejar de ser Onofre Contreras y convertirme en otro. Es un crecimiento enorme y una fuente de emociones constantes. La adrenalina del teatro es pura emoción”.
Un desafío en ‘Te amo Fausto tercero’
Uno de sus proyectos más recientes es Te amo Fausto tercero, donde interpreta al “Diablo”, un personaje con múltiples matices que maneja tanto la energía masculina como la femenina. “Fue un gran reto personal dar vida a este personaje, porque soy el pensamiento de ‘Fausto’ y ‘Ana’ y, de alguna manera, los dirijo en escena”. Contreras describe la obra como “un viaje emocional en todos los aspectos”, y su personaje tiene una presencia constante en la historia.