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Puerta Escénica

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Tres tristes viejas

La puesta en escena de Pedro Sánchez Tres tristes viejas, ha logrado una temporada estable de siete meses que se antoja aún más extensa.

CARTELERA

Mi Cartelera Puebla
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Es probable que los teatreros en Puebla hayamos perdido de vista la oportunidad de alcanzar a distintos sectores, que no solo se encuentren en la generalidad de un público “mayor de edad”.

La profesionalización en los estudios teatrales abastece al campo artístico de jóvenes cuyas apuestas se pierden sin consolidar estéticas, equipos y discursos; pero también ante la falta de un público perseverante.

Hay una sutil complicidad entre el actor y sus espectadores que no hemos alcanzado a comprender. Como excepción a ese panorama la puesta en escena de Pedro Sánchez Tres tristes viejas, ha logrado una temporada estable de siete meses que se antoja aún más extensa.

De una sencillez rotunda en decorados y acción, la obra se asienta sobre la dramaturgia y el trabajo actoral.

Dramaturgia con una temática casi no explorada: la sexualidad en la vejez y al mismo tiempo la senectud como oportunidad para vivir sin tapujos, sin las máscaras del lenguaje ni la rivalidad.

Es destacado el trabajo de Fernanda López, en una obra cuyo tono está siempre al filo de convertirse en un grotesco (ante la dificultad que implica el logro de verosimilitud en personajes que triplican la edad de las actrices) su actuación catapulta y equilibra el trabajo para la distinción de tres personalidades bien definidas, amén del diseño bien logrado de cada personaje por parte de Pedro tanto en la dramaturgia como la dirección. Sólo hay un pequeño tope en el desarrollo, una suerte de falso final que relaja la tensión dramática y resta fuerza al desenlace.

La obra, sin embargo, transcurre amable, con todo lo de amable que puede lograr una farsa evidenciando nuestras moralidades y tabúes, poniendo al descubierto un sentido pleno de la existencia más allá de lo que la edad y la sociedad imponen.

La “pequeña obra” es también un aprendizaje enorme para un equipo que se encuentra en los inicios, en el descubrimiento de ese público y las temáticas que consiguen una temporada exitosa e ininterrumpida sin más difusión que la nada morbosa publicidad impresa y las recomendaciones.

“Tres tristes viejas” de Pedro Sánchez y la compañía Morbo Teatro se presentó en El breve espacio.

Por Thelma I. Ramírez Cuervo (AT)